En este momento estás viendo La Importancia de la Inmovilización de Bienes Inmuebles en Guatemala

La importancia de la inmovilización radica en que existen personas o bandas dedicadas a robar propiedades por medio de la celebración de contratos falsos, en los cuales se simula o finge la compraventa de un bien registrado, sin autorización o consentimiento del propietario.

Ante estas anomalías se aprobó el decreto 62-97, el cual regula todo lo relativo a la inmovilización.

La inmovilización de bienes inmuebles (terrenos, casas, apartamentos, etc) se establece como una forma de candado o protección contra estas estafas.

El procedimiento consiste en hacer una solicitud al Registro de la Propiedad manifestando que cualquier enajenación o gravamen a favor de un bien debe ser autorizado por medio de la huella dactilar del propietario.

¿Cómo funciona?

La legislación guatemalteca, no requiere del registro de nuestra huella dactilar (únicamente de la firma) para que sean considerados válidamente celebrados, los contratos de compraventa de determinado bien inmueble.

Evidentemente, falsificar una firma, no requiere de mayor esfuerzo.

Sin embargo, al solicitar la inmovilización del bien inmueble, lo que se pretende es que dichos contratos deben llevar la huella dactilar impresa, y esta debe coincidir con la que se registró al momento de constituir la inmovilización.

Características

  • La inmovilización puede constituirse por un máximo de 3 años y un mínimo de 1 año, susceptible a renovación,
  • El costo de la inmovilización es de Q160.00
  • La huella puede registrarse de forma biométrica. Es decir que el propietario debe presentarse ante el Registro de la Propiedad para registrarla de manera digital.
  • La firma y huella digital de la solicitud de inmovilización debe ir legalizada por un notario.
  • La inmovilización puede realizarse por medio de un mandatario, y en el caso de las Sociedades Anónimas, por medio del representante legal o mandatario con facultades suficientes.

Conclusión

Actualmente no se cuenta con la seguridad jurídica e institucional que ofrezca la tranquilidad que nuestros bienes no serán objeto de estafa.

En consecuencia, la inmovilización se ha convertido en una medida indispensable para ofrecernos esa paz, que no representa mayor gasto y gestión.